Linkedin

Adiós al vicio de estar sentado

En la era moderna, el sedentarismo se ha convertido en un hábito predominante que afecta la salud de millones de personas. El vicio de estar sentado durante largas horas, ya sea frente a una pantalla o en una oficina, ha desencadenado preocupaciones significativas sobre la salud física y mental. Es hora de reconocer este desafío y tomar medidas para revertir sus efectos perjudiciales.

El sedentarismo es mucho más que la falta de ejercicio; implica un estilo de vida que limita la actividad física y promueve largos periodos de inactividad. Para contrarrestar este problema, es fundamental entender la importancia de moverse.

Nunca es tarde para implementar actividades deportivas en nuestra vida diaria, teniendo en cuenta, en el caso de los adultos mayores, las propias capacidades y necesidades. Así, considerar un reacondicionamiento gradual, respetando los límites físicos y adaptando los ejercicios a las cualidades individuales, es lo ideal.

A medida que avanzamos en edad, es vital priorizar la regularidad y la consistencia en la actividad física. Caminar, nadar, practicar yoga o realizar actividades de bajo impacto pueden ser excelentes opciones para mantenerse activo y cuidarse.

Es crucial encontrar un equilibrio entre el tiempo dedicado a la actividad física y el tiempo sedentario. Pequeños cambios, como levantarse y estirarse cada cierto tiempo durante las horas de trabajo, pueden marcar una gran diferencia en nuestra salud.

Nuestra terapeuta física Lizeth Suárez explica los riesgos del sedentarismo y la importancia de hacer actividad física.

 

Actividades recomendadas según el rango de edad:

  • De 5 a 17 años: juegos, deportes y actividad física recreativa durante 60 minutos diarios. Tres días a la semana, es conveniente realizar actividades que contribuyan al fortalecimiento osteomuscular.
  • De 18 a 64 años: 150 minutos semanales de actividad física moderada (caminar, bailar, sacar al perro) y 75 minutos de actividad física más intensa (correr, nadar, ir al gimnasio).
  • 65 años en adelante: se recomienda la práctica de actividades físicas variadas, orientadas a estimular el equilibrio funcional. Asimismo, un entrenamiento moderado de la fuerza muscular, tres días a la semana, para mejorar la capacidad funcional y prevenir las caídas.

También te puede interesar

Complementary Content
${loading}